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Cómo practicar la atención plena en la naturaleza




Cómo practicar la atención plena en la naturaleza

Descubre la paz en la naturaleza

La naturaleza tiene el poder de calmar nuestra mente y hacernos sentir vivos. Practicar la atención plena en la naturaleza es un método efectivo para desconectar de la llamada de los teléfonos inteligentes y conectarnos de nuevo con el mundo que nos rodea.

¿Qué es la atención plena?

La atención plena es una práctica contemplativa que se centra en el momento presente, sin juzgar ni criticar. Consiste en prestarnos atención a nuestros pensamientos, sentimientos y sensaciones físicas sin intentar controlarlos ni cambiarlos. En la naturaleza, esta práctica puede ser aún más efectiva ya que nos permitirá desconectar de la sociedad y conectarnos con la realidad.

Preparados para practicar la atención plena en la naturaleza

  • Encuentra un lugar tranquilo en la naturaleza: un parque, un bosque, un río, un lago, etc.
  • Elige un momento pacífico del día: al amanecer o al atardecer es ideal ya que es más silencioso y hay menos gente.
  • Lleva un par de zapatos cómodos y ropa suave.
  • No olvides llevar un agua y una manzanita o una fruta para manteneros hidratados.

Ejes para la práctica de la atención plena en la naturaleza

La atención plena en la naturaleza se centra en varios ejes: la observación, la respiración y el cuerpo físico.

La observación

La observación es uno de los ejes más importantes para la práctica de la atención plena en la naturaleza. Presta atención a los sonidos que surrounded you, el canto de los pájaros, el chapoteo del agua, etc. Fíjate en los colores y formas que te rodean, en las hojas de los árboles, las flores, los peces que nadan en el agua, etc. No tengas que interpretar lo que ves, solo obsérvalo.

La respiración

La respiración es el segundo eje importante para la práctica de la atención plena en la naturaleza. Presta atención a tu respiración, a cómo tus pulmones suben y bajan, a cómo sientes el calor del aire entrando en tus narices y saliendo de tus pulmones. No intentes controlar tu respiración, solo obsérvala.

El cuerpo físico

El cuerpo físico es el tercer eje importante para la práctica de la atención plena en la naturaleza. Fíjate en cómo sientes tus pies en el suelo, en cómo sientes el sol en tu piel, en cómo sientes el viento en tu cabello. Presta atención a cualquier sensación física que te haga sentir en este momento.

Conclusión

La práctica de la atención plena en la naturaleza es un método efectivo para desconectar de la sociedad y conectarnos de nuevo con el mundo que nos rodea. Gracias a estos ejes puedes desarrollar una mayor conciencia de ti mismo y de tus pensamientos, sentimientos y sensaciones físicas. No dejes de practicar la atención plena en la naturaleza, es un regalo para ti mismo y para la naturaleza.